Nada más sentarnos y pedir, empezaron a ocurrir cosas extrañas...
¿A quién se le ocurriría envasar, etiquetar, embalar y vender Coca-Cola... en una botella de Fanta? Telchar fue nuestro cabeza de turco, se la bebió asumiendo todos los riesgos...
Comimos de todo menos manillas de cerdo (que era lo que el camarero llamó caminantes, qué gracioso), y repetimos de calamares. Todo muy rico. Lo que es hablar, no hablamos demasiado, estábamos demasiado ocupados con mascar a dos carrillos. Que mucho elfo, mucho elfo, pero luego todo el mundo se apunta a comer como hobbits ¬¬
Por cierto: probé la fritada mallorquina, que no me quisieron decir de qué estaba hecha en un principio (en palabras de Aina porque si no no te lo comes) pero noté enseguida el sabor característico. Esto es hígado. Y esto corazón... Resultó ser casi lo mismo que la asadura o bofada que comemos aquí. ¡Loor a los riñones al jerez!
Y como una es embajadora de Imladris, y eso no se olvida, qué menos que exportar las magnas costumbres de mi smial a Tol Eressëa...
Y, no podía ser de otro modo, se brindó por Imladris con nuestro famoso brindis de las croquetas.
Acabamos el ágape (que nos salió baratuco) y nos despedimos para el resto del viaje. Espero volver a veros pronto. Sabed que tenéis una guía solícita en Segovia si os pasáis por acá, y si vuelvo yo, que todo sea tan bueno como fueron estos días vividos con vosotros.
Volvimos a Sóller después de recuperar a Morris (y de que Telchar le forjase en la parte trasera con el yunque y el martillo enanos) e hicimos un poco de tiempo antes de ir al siguiente compromiso. Quizá demasiado, porque a las ocho nos informaron de que deberíamos estar allí hacía media hora...Demasiado tarde hasta para un mallorquín, jajajaja...
Antes de entrar en casa de Yolanda, encontramos dos carteles (en mallorquín y castellano) en que nos daban la bienvenida a la taberna 'Ca Nostra'. Intrigada, me pregunté qué me habrían preparado...
Fue fantástico. Se habían currado un juego de preguntas y respuestas para otro 'forastero' (en su caso, de Almería) y para mí sobre nuestras ciudades. Luego nos dimos los regalos de amigo invisible (un marco de fotos donde pondré una foto de este viaje, seguro) y nos obsequiaron con un siurell a los inmigrantes.
Un siurell es una figura de cerámica que tiene trabajado un silbato en la parte posterior (del sonido, su nombre). Si lo soplas, ahuyenta los malos espíritus. También se dice que los vientos que a veces azotan la isla producían miedo a sus habitantes, que trataban con el silbido del siurell de espantar estos vientos. Están pintados en blanco, y decorados con pinceladas de verde, rojo o azul.
Lo curioso también es que eso del silbato con formas de animales o personas es característico de los pastores de Segovia... XD XD
Me lo pasé genial, y atesoro tanto el siurell como el marco, así como (buena mitómana que soy) el papelito que nos dieron con la figura escrito en mallorquín y castellano, y el papelito de las preguntas. Yolanda también me dio unas cuantas pautas para tratar a los mallorquines (como ella es catalana... XD) bastante curiosas y útiles.
Al día siguiente, por la tarde, ya montada en el avión, me di cuenta de la cantidad de cosas que me llevaba conmigo. Este viaje me ha hecho un poco más sabia. Y aunque fuese de noche, el viaje de vuelta fue igual de hermoso. Porque descubrí que los hombres también trazan constelaciones en la tierra con las luces de sus pueblos, de sus ciudades, de sus granjas.
También descubrí que quienes suben las maletas al avión no son duendes... cómo lo harían con esas manos diminutas y esos bracicos corticos...
... y lo bien que sienta un Nesquik cortesía de Air Europa cuando estás con el ánimo tan bajo.
Volveré, no hay duda. Aún me quedan demasiadas cosas por ver en Mallorca, demasiados paisajes por descubrir, demasiadas costumbres por compartir. Besos a aquellos que habéis hecho posible esta aventura.
Findûriel.
9 comentarios:
Jooooo! Qué genial todo ... Si me da penita hasta a mí que se acabe el viaje, porque era como si estuviese viajando yo misma ...
Bueno, ya habra más seguro, y seguro que nos los contarás igual que éste ...
Ohh, vaya, Silmaril me a quitado las palabras... pienso eso mismo, porque tambien lo he sentido(casi lloro)
Celebrian mode ñoño
¿Ya no más?
¿Ya está?
¿Se acabó?
Joooooooooooo :'(
¡Con el enganche que tenía yo con la crónica!
Me alegra que te lo pasases tan bien y que te traigas tantos recuerdos. Por lo que escribes te trajiste la maleta llena de lo mejor que puede contener nunca, mucho cariño ^^
:****
Me alegra que disfrutaras del viajecillo. Lo que me resulta bastante triste es, que para saber de ti, tenga que acudir a tu maldito blog. Te recuerdo que existen los teléfonos y, qué carajo, vivimos a menos de 20 minutos.
Saluditos:
Nightmary algo cabreada
Existe otra ariante de fritada que en lugar de lo que has dicho lleva sangre coagulada, hay gente para todo.
ENVIDIA DE VIAJE.
Y yo de exámenes y trabajando. Ya te vale, ¿no? xDDD
Muak!!
Peacho crónicas y eso que sólo estuvistes cuatro días, si llegas a estar una semana escribes un libro.
Por cierto, todo lo de aquí es como en Segovia, que los Siurells, que el frit mallorquí....a éste paso hasta los acantilados y el Mediterráneo serán como los de Segovia...hay no!!!, que en Segovia no hay mar!!! :-ppppp. En serio, cuando vaya por tu tierra a ver si me enseñas esas similitudes o hablamos de ellas durante la próxima EstelCon (otra cosa más a añadir a la lista).
Preciosa crónica! Me ha encantado!
Me pregunto por qué siempre ponemos caras raras cuando nos sacan fotos...
jo, que envidia,te lo tuviste que pasar como una enana,ejem, perdón como una hobbit que hay que hablar con propiedad. Me imagino que no tardarás en repetir uno similar XDD
Besicosssss
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